DEL MERCADO A LA MESA....

Esa es la traducción del título del libro que os presento hoy, y que me he traído del mercado de la Boquería con el pescadito y la carne.
Se trata de un libro que no está en las librerías, sino que ha editado la Diputación de Barcelona para potenciar y recuperar el concepto de la compra en los mercados municipales.
Son 120 recetas en catalán que distintos clientes y clientas han elaborado con productos de mercado con un cierto sabor de cocina tradicional catalana.
Podemos encontrar una empanada de la huerta, una crema de setas y castañas, risotto con trufa blanca, montgetas (alubias blancas) con trompetas de la muerte y gambas, caracoles de la bisabuela Maria....
Recetas relativamente fáciles, en las que además de los ingredientes, la explicación de la elaboración y la foto, vienen con el nombre del cliente o clienta que lo ha elaborado. Suponemos que estarán muy orgullosos de ser partícipes de este proyecto.

A mi personalmente me gustan tanto los mercados por muchísimos motivos.
1- Se puede comprar a granel, de uno en uno....
2.- Al haber muchos puestos de lo mismo (pescado/carne/verduras/fruta, etc) podemos comparar precios, calidades y decantarnos por uno u otro dependiendo de nuestras necesidades.
3.-Suele haber cosas que a veces no es tan fácil encontrar en un supermercado. Productos de otros países, encurtidos variados, legumbre ya cocidas al peso, setas a granel, hierbas y especias al peso....
4.-Me encanta la multitud de colores, el bullicio, los tenderos y tenderas reclamando nuestra atención...
5.- Saber que vas a los puestos en los que ya confías, creandose con los meses una relación vendedor - cliente mucho más cercana; Te preguntan qué tal todo, que tal te salió el guiso que querías hacer, te recomiendan cómo cocinar algo o cuánto tiempo cocerlo...En una gran superficie esto casi nunca será posible.

Con este recetario, se ha querido demostrar que los mercados no son sólo lugares de compra y venta, lugares donde aprovisionarnos de los alimentos que necesitamos para nuestros menus diarios, sino también un elemento de referencia social, para transmitir valores que deberíamos intentar preservar y potenciar para las generaciones venideras.
Me ha gustado la idea, aunque sé que está siendo bastante difícil conseguir un ejemplar. Se distribuyen gratuitamente en los puestos de los diferentes mercados municipales de la provincia de Barcelona. No sé si habrá un segundo recetario, pero me encantaría!