
Bueno, el risotto lo he hecho como en otras ocasiones, un poco de cebolleta rehogada con mantequilla, añadir el arroz bomba en este caso, y sobre esto medio vaso de vino. Entonces ir añadiendo el líquido de caldo con espinacas cada poco tiempo y dejando absorberlo y volver a echar, etc. Ha de hacerse durante 16 minutos (he salado poco porque luego con el queso y el salmón mezclados ya es suficiente). Luego, con el fuego ya apagado, echo un pelin de crema de leche o leche evaporada si preferís. Removemos y enseguida echamos un puñado grade de espinacas que hemos cortado con las manos de modo grueso. Con el calor que mantiene el arroz se hacen estas últimas espinacas y quedan con una textura algo crujiente pero hechas....muy interesante.
Emplatamos con el risotto en el centro del plato, unos trozos o tacos de salmón ahumado en los laterales y por encima unas lascas que he hecho en el momento con queso parmigiano del que me traje de mi viaje a Italia. Decoro con dos hojas de espinacas crudas que tambien comeremos. De este modo hay una mezcla de texturas y sabores que juntos.....brutal, de verdad. Me ha quedado muy similar al de Praga pero he puesto el añadido de las lascas, de la espinaca en crudo y un chorrito de aceite de oliva virgen extra traido de Italia...me gusta mucho tunear recetas y en este caso ni siquiera tenía la receta, así que ha sido al tun tun a ver si acertaba.
Espero que os animéis porque es muy fácil y el resultado es buenísimo.
2 comentarios:
jo que pinta tiene este risotto! Estoy segura que si yo lo hubiera comido en Praga y lo hubiera querido repetir no habría sabido ni por donde empezar.Eres un hacha.Y encima reinventas la receta. Muy bien muchacha.Una crack es lo que eres!
me gustan estos aires renovados que le has dado al blog. Mucho más elegante y esta receta, pues mas de lo mismo. Bueno, más bueno, buenísimo
Laura
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